y ahora

y ahora lo de siempre, escribir, escribir... dejar q los dedos pulsen las teclas y contar con las manos, dibujar pequeñas plabras, muy pequeñitas q no digan nada, o casi nada, q no es lo mismo pero es igual, decir q estoy triste se vuelve redundante, decir q etoy confundido es algo nuevo, q no entiendo nada, nada, cuan equivocado puede llegar a estar uno, o quizas cuanta razon se puede llegar a tener, cuando esas cosas q uno piensa a las tres de la mañana, esos pequeños fantasmas que se esconden debajo de la cama, surgen desde el armario y entonce ¡buuuu! como dice la amelia, los miedo cotidianos te dan una patada en los testiculos, xq el amor propio ya ha sido bastante golpeado, por otra clase de monstruos, alguna especie reconocida de fantasmas y entonces, nada, lo de siempre, escribir, escribir, pulsar las teclas y escuchar como suena una buena musica de fondo que no tiene nada que ver con nada, buscar pequeños planes cotidianos, buscar pequeñas caras en las nubes, rezarle a los dioses para que manden un sueño erotico con liz vicious o con alguien a quien se haya querido, porq las mujeres alla afuera son tan insipidas, dociles, exigentes, tan.. y escribir, decir nada, y decir muchas cosas, colar pequeñas verdades, confesiones esteriles, entre tanta palabraria rimbombante y risonante, ni siquiera se lo q significa rimbombante la verdad, he ahi una pequeña confesion, ecribir, escribir, y comer chocolate, porq hay suficiente chocolate como para alimentar un ejercito, suficiente como para treinta noches de invierno en q amenaza con llover, pero Erü ni siquiera eso quiere mandar, suficiente chocolate como para honrar una musa, suficiente manjar como para 6 marraquetas o para cubrir un par de senos q se podrian haber lamido, si solo una palabra no hubiera sido dicha, si solo una decision no hubiera sido tomada. Escribir y decir cualquier cosa, ahora pinto en mi ipad, descubri q hay una app para pintar con los dedos, con 15 tipos distintos de pinceles, paleta de 255 colores, posibilidad de insertar capas, es una lastima pinte un cielo precioso, queria mostrartelo y entonces, ahora nada lo de siempre, la vieja intoxicacion a base de cigarros, otra vez casi consigo dejarlos, beber ron y vodka y tequila, cerveza en algun bar, de litro ojala una buena austral, y si no hay plata un par de escudos, y escribir y hacer origamis de cualquier cosa, aprendi a hacer un conejo para la amelia, y un dinosaurio para mi, entonces siempre se puede comprar papel lustre y hacer un pequeño zoologico de papel, terminar de escribir los nueve circulos, seria un best seller si pudiera pasar de aquel capitulo, si me decidiera a cerrar esa pagina, si fuera capaz de escribir de una vez aquello q me costo escuchar, escribir una autobiografia a los 23 es una estupidez pero hay q escribir, hay q escribir, hay q dejarle una carta en el viento, plegar pequeños papeles de colores con versos de huidobro y tirarlos desde el balcon una mañana con mucho viento y pienso en el hombre lobo detective, en su historia que construye cada lector, pienso en esa niña que le ayuda en cada paso, que atravez de acertijos y absurdos le da nuevas pistas, lo guia entre paginas y tinta ¿dejaremos a esa niña sin nombre? escribir, escribir, poemas por montones, cuentos absurdos por montones y entpnces cuando los dedos duelan, cuando la garganta este seca, o cuando se acabe la bateria de esta mauina de escribir postmoderna, ir a una editorial con un rifle, o mejor una buena AK 47 y gritar ¡todos al suelo! publiquenme o mueran! y entonces habre sacado algo bueno de todo esto